TEMPLOS ROMANOS
Los arquitectos romanos siguieron las pautas establecidas por las órdenes clásicas que los griegos habían dado forma por primera vez. Además, las columnas continuaron usándose incluso cuando ya no eran estructuralmente necesarias. Esto fue para darles a los edificios un aspecto tradicional y familiar.
La vida de los romanos está marcada por festivales y ritos religiosos.
El templo es, por lo tanto, un elemento fundamental de la ciudad romana. Una
ciudad romana a menudo tiene varios templos. Los templos de la época real a
menudo estaban dedicados a las tríadas. Posteriormente, cada templo estará
dedicado a un dios en particular. El templo romano es el símbolo del poder
protector de los dioses. Algunos templos están incluso delegando la adoración
del emperador.
Entre todas las obras arquitectónicas de griegos y romanos, los templos
construidos para los dioses inmortales expresan mejor que cualquier otra forma
de monumento la perfección del arte clásico. No podemos sorprendernos y, de
hecho, lo contrario sería sorprendente- ya que la búsqueda de una forma de dar
a la efigie del dios y la necesidad de crear un refugio digno de recibir esta
imagen divina, fueron ideas que han animado al genio creativo en muchas artes.
El Templo de Augusto de Barcelona (España) fue un templo romano
dedicado al culto imperial a César Augusto construido en Barcino, colonia
fundada con el permiso de Augusto, que sería con el paso del tiempo la ciudad
de Barcelona.
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